Bienvenidos a El Almacén

Lo que embellece al desierto es que en alguna parte
esconde un pozo de agua.

Antoine de Saint-Exupery (1900-1944) Escritor francés.

lunes, 21 de septiembre de 2015

La Cultura y Usted

A veces tengo la impresión de que la palabra o el concepto "cultura" está impregnado de prejuicios. Pareciera ser que la cultura es algo que ocurre en otro lado, que hay gente "culta" o "culturosa" y gente que no lo es; que lo cultural es una exposición de cuadros pero no lo es, por ejemplo, saber cocinar una pizza.
La cultura, como concepto, es tan antigua como los intentos del hombre por comunicarse. En algún momento, allá lejos en el tiempo, un ser humano reconoció a otro, seguramente de la misma manada y, aunque no se detuvo en clasificaciones, inició un proceso que aún continúa. Al principio fueron gestos, tal vez rayas en la arena o la tierra con una rama; más tarde sonidos provenientes de su propia garganta. ¿Se imaginan los cientos o miles de años que mediaron entre esos sonidos y las primeras palabras? ¿Se imaginan el progreso cognitivo que significa construir conceptos y significados a partir de absolutamente nada?  ¿Nos imaginamos el proceso que se disparó luego? ¿Hemos pensado alguna vez que todo el progreso del pensamiento humano se lo debemos a la iniciativa de un grupo de individuos que vivían en cuevas?   Si bien reconocemos a la cultura griega como la "cuna de la civilización occidental", ellos no vinieron, por lo menos que se sepa hasta ahora, en naves de otros mundos. Son, también, deudores de los primeros 10  o tal vez menos "humanos" que comenzaron a comunicarse con palabras.
A partir de ese momento lo que se fue construyendo pasó a formar parte de las diversas culturas con sus músicas y sus vestidos, sus formas de gobernar y construir, sus alimentos y estructuras familiares.

El solo hecho de nacer y compartir este idioma nos hace partícipes de una cultura milenaria que tiene, como ya lo dije, ascendiente en la cultura grecolatina.
El problema es que la mayoría de los ciudadanos se sienten excluidos de ese proceso, tal vez creyendo que al no tener una formación específica no están capacitados para aportar lo suyo. Las políticas culturales deben sostenerse con la colaboración de todos, aquellos que tienen algo que entregar por formación profesional y aquellos que ofrecen su experiencia y sus intereses.
¿Acaso no es parte del concepto "cultura" el espacio dedicado a la educación formal?  El proceso de enseñanza-aprendizaje es un intercambio de doble vía. El docente enseña y también aprende así como el propio alumno. Debemos reconocer e internalizar que el nuestro es un proceso continuo de aprendizaje que no se limita a nuestro paso por los ambientes académicos de distinto nivel. Aprendemos cuando alguien nos cuenta algo que no conocíamos y eso enriquece y acrecienta nuestro acervo cultural personal.
Aprendemos, aunque sea un poco, cuando observamos a un pintor, o a un músico.
La cultura es nuestra, es del pueblo. Es una realidad que va cambiando, reformando, actualizando tanto como manteniendo y reconociendo los cimientos sobre los que se construyó.
Y es nuestro deber ser partícipe para defenderla, mejorarla, engrandecerla.



César G. De Gerónimo

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